La bajada de las campanas dejan al Campanario de la Parroquia de Lopera huérfano
Por José Luis Pantoja Vallejo - Cronista Oficila de la Villa de Lopera
Hoy a las 11 de la mañana se finalizaba la bajada de la última de las campanas (la gorda) de la iglesia parroquial de Lopera, dejando una estampa inédita en el campanario sin campanas, que sólo recuerdan los más viejos de Lopera, cuando en la antesala de la Guerra Civil fueron las campanas lanzadas a la plaza produciendo un gran socabón en la misma. La gorda que ha sido la última en ser bajada tiene por nombre Maria del Carmen y fue refundida de la vieja en los tiempos que estuvo de párroco D. Martín Santiago Fernández. La vieja campana gorda tenía el siguiente epitafio:
María la Gorda me llaman
y cien quintales peso
el que no lo quiera creer
que me tome en peso
que me de dos vueltas a la Plaza
y que me suba a mi casa.
En unos días cuando sean limpiadas y restauradas sus ejes volverán de nuevo las campanas al campanario, mientras tanto el mismo ha quedado huerfano.
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