La tradición de lanzar prendas y acercar los niños a los Trinitarios para que se pasen por el manto y besen a la Virgen de la Cabeza.
Por José Luis Pantoja Vallejo - Cronista Oficial de la Villa de Lopera
Una de las escenas más emotivas de la Romería de la Virgen de la Cabeza se produce cuando la Morenita sale en procesión de su Basílica-Santuario y se reencuentra con los miles de devotos y romeros de la Reina de Sierra Morena. Dos Trinitarios subidos en las andas se encargan de recoger los cientos de prendas (saquitos, gorras, sombreros, pañuelos) que le lanzan los devotos y los pasan por el manto de la virgen, si bien una de las escena más entrañables se produce cuando los padres acercan a sus hijos a los Trinitarios para que puedan besar a la Morenita, aquí en cronistadelopera publicamos uno de esos momentos cuando el loperano Francisco Medina Bellido acerca su hijo Pedro Luis Medina Román al Trinitario ante la presencia de los anderos y la escolta de la Guardia Civil.
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