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José Luis Pantoja Vallejo

Antonio de Torres Velasco. Fue un enamorado de su familia y de su pueblo.

Antonio de Torres Velasco. Fue un enamorado de su familia y de su pueblo.

Por José Luis Pantoja Vallejo - Cronista Oficial de la Villa de Lopera

El recuerdo vivo de Antonio de Torres Velasco sigue muy presente en sus familiares, amigos y vecinos de Lopera a pesar de que su fallecimiento tuvo lugar ya hace algunos años. Fue el mayor de 3 hermanos, sus padres fueron Manuel de Torres Roldán y Mª Manuela Velasco Valenzuela. Estudió la carrera de practicante en las Escuelas del Ave María de Granada. En la Guerra Civil, fue sanitario en el Frente de Peñarroya-Pozoblanco. Tras la guerra ejerció como practicante en Lopera y después en Arjona, allí conoció a la que sería su esposa, Concepción Ramos Serrano, fruto de cuya unión nacieron 5 hijos (Manuel, José Domingo, Antonio, Jesús y Francisco Javier). De nuevo en Lopera ejerce como administrador agrícola de la Familia Morente, de D. Alfonso Orti y de sus propias fincas. Fue concejal del Ayuntamiento de Lopera y miembro de la Cámara Agraria Local, donde tuvo un papel destacado en la puesta en marcha del primer riego municipal “Cristo Chico”. Con la ayuda inestimable de D. Alfonso Orti, puso en funcionamiento el Hospital-Residencia de ancianos “Ntro. Padre Jesús Nazareno”. En 1977 volvió a ejercer como practicante sustituyendo a Antonio Mérida.  Aficionado a la caza en general, pero sobre todo a los galgos (“Hebrea” y “Saeta”) a caballo. Fue un cristiano que sentía gran devoción por el Cristo del Humilladero, Ntro. Padre Jesús (fue presidente de la cofradía) y por la Virgen de la Cabeza.  Era un hombre de carácter firme, con un gran corazón y muy generoso. Tenía grandes amigos con los que le gustaba tomar el vino en la taberna de Tomás. Fue un gran padre y un gran abuelo, pues sentía gran pasión por sus 5  nietos  (Concha, Antonio, José Domingo, Beatriz y Jesús) y dos biznietos (Javier y Manuel Jesús). Murió junto a sus hijos y cuñada Paz, que siempre vivió con ellos. Su memoria permanecerá siempre viva en el recuerdo más íntimo de todos sus descendientes.  

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