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José Luis Pantoja Vallejo

Una Casa para la Cofradía de Lopera en el Santuario de la Virgen de la Cabeza. (1857-2010). Apuntes para su historia.

Una Casa para la Cofradía de Lopera en el Santuario de la Virgen de la Cabeza. (1857-2010). Apuntes para su historia.

Las Cofradías subiendo la calzada, al fondo a la derecha la Casa de Lopera en 1927

Por José Luis Pantoja Vallejo - Cronista Oficial de la Villa de Lopera

Como ya es tradicional por estas fechas, un año más y van 18 esta es la colaboración que este año he presentado a la Revista Mirando al Santuario en su número 27, que se presentó anoche y ha publicado  la Real Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza de Andújar:

UNA CASA PARA LA COFRADÍA DE LOPERA EN EL SANTUARIO DE LA VIRGEN DE LA CABEZA. (1857-2010). APUNTES PARA SU HISTORIA.

Tras la reedificación llevada a cabo en 1854 por la Cofradía de Nuestra Señora de la Cabeza en Lopera, los cofrades toman la decisión de adquirir un terreno en las faldas del Cerro de la Cabeza donde poder construir una casa de hermandad para dar cobijo a la cofradía en la noche de la Romería que se celebra tradicionalmente el último domingo del mes de abril. Asimismo también se acuerda adquirir un terreno contiguo a la casa en el cual poder albergar las bestias, dado que éste era el principal medio de transporte en esos tiempos.

Así el 13 de mayo de 1857, re reunieron en la ciudad de Andújar, por una parte: D. José Carlos Velluti Tavira, XIII Marqués de Falces y del Cerro de la Cabeza y propietario de la Dehesa llamada de la Virgen en Sierra Morena, en cuyo terreno está situado el Santuario de la Virgen de la Cabeza, y de otra, una Comisión de la Cofradía de la Virgen de la Cabeza de Lopera formada por: Francisco Zurita Sánchez (Hermano Mayor), Antonio García Bueno, Alonso Ferruz, Antonio Alcalá García y Antonio Morales Alcalá. Los cuales están interesados en adquirir un terreno al referido Marqués, para edificar una casa destinada como albergue para los Cofrades en la Romería del último domingo de abril. El terreno elegido por la Cofradía estaba situado a la derecha del camino saliendo por el Arco de la Plaza, frente a frente de otra casa, que a la izquierda del mismo camino tiene recientemente edificada la Cofradía de Alcalá la Real. El terreno deberá tener entre 24 y 30 varas (una vara equivale a 836 mm.) de frente y de 40 a 50 varas de extensión, para poder formar un corral proporcionado a su albergue. A esta extensión accedió el propietario del terreno, el citado Marqués, por un precio de 1.333 reales, teniendo que pagar la Cofradía de Lopera al Sr. Marqués del Cerro y a quien su derecho represente la cantidad de 40 reales de réditos (con plazo hasta el 13  de mayo de cada año) mientras no se redima. Y para tener la seguridad de cobro, establecen imposiciones de hipoteca sobre la casa a construir, la que se obligan a no vender, partir, dividir, ni en manera alguna enajenar, sin el gravamen que le afecta y lo que en contra se hiciese ha de ser nulo y de ningún valor. Los componentes de la Comisión ofrecen todos sus bienes en general, para hacer frente a la compra del dicho terreno, donde edificar la casa y en caso de incumplimiento con los requisitos expuestos en la escritura, se les apremie por todo rigor de derechos. La escritura se firmó ante el escribano de Andujar D. Sebastián Romero [1]

Hay que destacar la gran labor de la Cofradía de la Virgen de la Cabeza de Lopera hasta que consiguió lograr finalizar la casa de cofradías que construía en las faldas del Cerro de la Cabeza, comenzada en el año 1880 y terminada en 1924. Durante este periodo, son varias las fases que se acometen en la obra de la casa, destacando tres, la de 1889, 1898 y 1924.

En la primera, la de 1889, se gastó un total de 654 reales y 26 maravedies que fueron donados por D. Eduardo Alcalá Monzó[2].

En la segunda, la de 1898, se procedió al entablado de la casa y ventanas, ajustado en sesenta y cuatro duros y 16 reales, para lo cual se necesitó los siguientes materiales: 

-         28 vigas de madera a 5 pesetas una ……………..140 Ptas.

-         6 docenas de tablas de tres varas a 5,50 una …….  33   “

-         5 docenas de tablas de dos varas y medio………..  25  “

-         Los tablones para la escalera…………………….     5  “

-         La madera para las ventanas……………………….  5  “

-         Dos paquetes de puntas a 1,25 uno………………..   2,50 Ptas.

-         Los cerrojos y pernios…………………………….    2,25  “

-         Cuatro fanegas de cal……………………………...  10      “

-         Cuatro fanegas de yeso……………………………   10     “

-         Una bestia para llevar las herramientas…………..      3,50  “

                                                   TOTAL…………….  236,25 Ptas.

Necesidades de los albañiles:

 

-         Antonio Melero (maestro de obras)…………………..10 Ptas.

-         Al panadero Manuel Salcedo 20 panes ………………..8   “

-         Aceite…………………………………………………   2,25 Ptas.

-         Un celemín de garbanzos…………………………….    2       “

-         Media cuarta de bacalao……………………………..     1,50  “

-         Media cuarta de arroz………………………………..     0,75  “

-         20 panes a 40 céntimos………………………………     8       “

-         Tabaco……………………………………………….      1       “

-         Dinero que se les dio en el Cerro……………………     20       “

-         Pecha………………………………………………..        7,50   “

-         4 vigas a 18 reales cada una………………………..      18       “

-         Las bestias………………………………………….         8,75   “

                                                         TOTAL………….      87,75 Ptas.

 

         Para sufragar los gastos de la obra de la casa, además de las pechas (cuotas) que aportaban los cofrades, se tuvo que recurrir a varios medios. Así en 1899 se rifó 1 borrego y 10 melones que costaron 32,50 pesetas. Se hicieron 850 papeletas a 10 céntimos cada una, comprometiéndose todos los hermanos a venderlas entre el vecindario. Un vez vendidas todas las papeletas y pagado los gastos que ascendieron a 37 pesetas al incluir el costo de la papeletas, quedó un beneficio para la cofradía de 48 pesetas.[3]

Otro sistema para recaudar fondos con destino a la casa fue el ideado en 1901, mediante el cual se acordó comisionar a los cofrades Manuel Agudo Hoyo y al párroco de Lopera Manuel de Torres Rodríguez, al primero para que arriende 10 fanegas de tierra y sembrarlas con sus mulos de escaña (especie de trigo) a beneficio de la cofradía y al cura para que pusiera la simiente.[4]

Una vez que la casa fue tejada y bien protegida con puertas y ventanas, se procedió en 1913 a solicitar al Sr. Marqués del Cerro, la posibilidad de hacer contiguo a la casa un corral, en el cual se pudieran recoger los carruajes y caballerías, dado que este era el principal medio de locomoción en estos tiempos. El Sr. Marqués dio el visto bueno y la Cofradía mandó para realizar las obras al maestro Manuel Candelario y dos peones, Roque Ange y Francisco Robledo, importando la mano de obra y materiales del corral (9 sacos de yeso, 5 fanegas de cal, 25 ladrillos, 2 pletinas, 8 tornillos, puntas y portes desde Andujar) un total de 41,80 pesetas.[5]. Después de muchos esfuerzos y trabajo, la cofradía de Lopera consiguió dar por finalizadas las obras de la casa del Cerro en 1924 con un final de obra valorado en 319, 55 pesetas. Para poder sufragar los costos del final de la obra se acuerda subastar las habitaciones de la casa, por un periodo de alquiler de dos meses. La planta baja y alta a razón de 50 pesetas cada una y la cocina a 35 pesetas.[6] Asimismo se acuerda nombrar un conserje-casero cuya misión sería el adecentar la casa y temerla provista de agua y leña y para ello marcharía al Cerro unos días antes de la fiesta del mes de abril, con el objetivo de que todo estuviera preparado para cuando llegase la cofradía. Tras la guerra civil la casa fue recibiendo un continuo mantenimiento de interiores y exteriores. Así llegamos al año 1980 a raíz de la renovación de la Junta Directiva de la Cofradía, estando de presidente José Bueno Torres se va a realizar una colecta por todo el pueblo recaudándose 200.000 de las antiguas pesetas para sufragar los gastos de la ampliación de la Casa de Cofradías con un segundo cuerpo con doble planta adjunto al primitivo edificio con una inversión superior a lo recaudado por lo que se tuvo que recurrir a mano de obra de los cofrades que durante muchos domingos desinteresadamente aportaron su trabajo para poder finalizar la obra. En años sucesivos en función de la economía se fueron realizando nuevas mejoras en tejados, servicios, habitaciones etc.

Dando un salto en el tiempo siendo presidenta de la cofradía Paqui Bueno de la Torre, junto al resto de la Junta Directiva se acuerda en el año 2010 una reforma integral de la casa, donde se acondiciona el edificio a los nuevos tiempos dotándolo de nueva instalación de luz y de dos grandes aljibes de agua potable, nuevos aseos con ducha de agua caliente, un nuevo acceso a la segunda planta, nuevo pavimento, revestimiento de todas las paredes interiores de la casa, una nueva chimenea, con un presupuesto cercano a los 50.000 euros. La segunda fase de este ambicioso proyecto abarca nuevos tejados y reformar toda la fachada acorde con el entorno respetando la antigüedad de la casa. Todas estas mejoras se han  realizado con el fin de que los romeros de Lopera  tengan un lugar digno donde puedan pasar los días de la Romería.

 

                            José Luis Pantoja Vallejo

Dr. en Historia y Cronista Oficial de la Villa de Lopera  



[1] Libro de Actas de la Cofradía de la Virgen de la Cabeza de Lopera. 1854-1935

[2] Ibidem

[3] Ibidem

[4] Ibidem

[5] Ibidem

[6] Ibidem

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